Si alguna vez ha impreso sus propios productos, sabrá que es mucho trabajo. Primero tienes que encontrar una buena fuente de materiales, asegurarte de que el troquel está centrado en la línea de montaje y luego imprimir tantos componentes como sea posible de una sola vez. Puede ser difícil hacer un seguimiento de todos los diferentes productos que estás fabricando y llevar la cuenta de cuánto material se ha utilizado. Pero con una impresora 3D, todo es muy fácil. Puedes fabricar tu producto con cualquier material -plásticos, metales, madera- y cualquier papel respetuoso con el medio ambiente es apto para la impresión 3D. Aquí tienes unos sencillos pasos que te ayudarán a empezar a fabricar algo desde cero:
Imprima los componentes físicos del producto que desea fabricar.
Algunos de los materiales más populares que puedes utilizar para la impresora 3D son el plástico, el vidrio, el metal, la tela e incluso la cerámica. Puedes encontrar excelentes guías sobre cómo sobrevivir en el mundo del plástico, el metal y la tela, pero por lo que respecta a este artículo, ya lo tienes todo listo. Hoy en día, la mayoría de las fábricas de impresora 3D utilizan software de impresión digital, lo que significa que puedes crear tus productos en horas en lugar de días. Puedes hacer casi cualquier cosa con una simple actualización del software. Una advertencia, sin embargo. Cuando empiezas a imprimir desde un ordenador digital, la resolución a la que imprimes se reduce. Un producto impreso con una resolución que se pueda imprimir te costará fácilmente entre 50 y 300 dólares al día. No querrás acabar con un producto de muy baja resolución que sea difícil de arreglar, sino con un producto de alta resolución que puedas imprimir y arreglar a la primera.
Utiliza el cabezal de impresión para recortar las partes deseadas.
El siguiente paso es encontrar una pieza de madera o plástico que te gustaría utilizar como pieza base de tu producto. Elige un material con el que puedas trabajar, que sea fácil de hacer en unas pocas docenas de piezas y que sea relativamente barato de fabricar. El siguiente paso es encontrar un modelo de impresora 3D que puedas utilizar para construir tus piezas. Hay varias maneras de hacerlo, pero el método que yo utilizo es recurrir a una tienda de imrpesora 3D en línea. Hago todas mis piezas en línea y se imprimen en un modelo de alta resolución que puedes utilizar para construir tus piezas. ¡Súper fácil!
Monta la cadena de montaje y dibuja tu diseño.
Ahora que has encontrado una gran fuente de materiales, es el momento de hacer que tu primera ruptura sea un poco atrevida. Quieres hacer tu primera tirada de producción lo antes posible. Lo ideal es que esta tirada sea lo más rápida posible. Hay algunas cosas que debes tener en cuenta mientras diseñas y construyes tus piezas: – Cuanto más detallado sea el diseño, más rápido se construirá. – Cuanto más fuerte sea el vínculo entre las piezas, mejor. – Cuanto más intrincado sea el diseño, menos probable será que se descubra. – Cuanto más caro sea su producto, menos gente estará dispuesta a comprarlo.
Imprime y monta tantas veces como quieras.
Una última cosa que recomendaría hacer es imprimir y montar tantas veces como sea posible. Esto hará que sea más fácil cambiar de opinión sobre el diseño y los diferentes pedidos que quieras. Es más, te permitirá hacer más ajustes a medida que tu línea pase por producción, porque tu modelo permanecerá intacto mientras lo haces. Dicho esto, asegúrate de documentar cada paso del proceso. Cada corte, escaneado y medida impresa que realice ayudará a otros empleados y clientes a comprender mejor su funcionamiento.
¡Adelante!
A medida que su empresa se desarrolle, se enfrentará a muchos retos. Por lo general, estos retos se gestionarán mejor con la impresora 3D que con las formas tradicionales de hacer negocios. Por ejemplo, un ama de casa necesita llevar la cuenta del número de comidas que le prepara su marido. Necesita saber con qué frecuencia va a la tienda de comestibles y dónde va a conseguir esos artículos necesarios. La impresión en 3D es una forma mejor de hacerlo. Con su producto, ella puede tener un informe completo de su día. Con la impresión 3D, sólo tendrá una nota descriptiva adjunta al pedido de materiales. Con esta información, sabrá exactamente dónde, cuándo y cuánto esperar de su producto. Esto hará que su producto sea más adecuado para guardarlo y llevarlo en el coche mientras se prepara para ir a trabajar cada día.