¿Qué es una partícula?

En la vida cotidiana interactuamos constantemente con partículas. Vemos objetos como trozos de materia, como vidrio u hormigón, o líquidos y moléculas de gas, por ejemplo.Estas interacciones implican la gravedad como fuerza sobre la materia; esto explica por qué la mayoría de los objetos tienen algún tipo de estructura que les permite entrar en contacto entre sí.En el mundo natural, a menudo hay muchos más tipos de estas fuerzas interactuantes que objetos que se puedan ver o tocar.Para conocer todos estos elementos en tu colección de partículas, necesitas entender qué es una partícula y cómo interactúan entre sí.Aquí tienes una visión general de qué es una partícula y cómo interactúan entre sí:

¿Qué es una partícula? – Introducción a las partículas en el mundo natural y artificial.

Como ya hemos mencionado, el mundo natural tiene muchos tipos diferentes de partículas. Algunas son atraídas por otras cosas, como un murciélago o un mosquito, y otras son atraídas por las personas, como las minas terrestres o los volcanes. Hay dos tipos principales de partículas en el mundo natural: las partículas orbitales y las cargadas. Las partículas orosféricas, que se encuentran en la atmósfera superior, son atraídas por la superficie terrestre y las zonas bajas, mientras que las partículas subatmosféricas o cargadas de nivel inferior son atraídas por la atmósfera superior y el suelo. Como todas las partes del mundo natural tienen algún tipo de interacción con las partículas virtuales, es importante entender de qué están hechas. Las partículas pueden clasificarse como líquidos o gases o, con la excepción de ciertos compuestos, nada más.

¿Qué determina qué tipo de partícula tenemos?

El tipo de partícula que entra en contacto con otra viene determinado por un par de factores, el primero de los cuales es la fuerza que actúa sobre la partícula. El segundo factor es el ángulo de impacto. Dependiendo de dónde se encuentren los dos objetos en la Tierra, el ángulo de impacto puede determinar el tipo de partícula que entra en contacto con la superficie terrestre. Los océanos desempeñan un papel importante en la formación y evolución de la mayoría de las especies terrestres. Muchas de las especies marinas más comunes, como los tiburones, los calamares y los moluscos, están formadas por especies que viven en el fondo de los océanos. Las interacciones físicas y químicas entre el interior y el exterior de nuestro planeta son muy importantes en la formación tanto de partículas como de la propia Tierra. Hay varios factores que pueden afectar a la cantidad y los tipos de partículas que se forman, pero los más comunes son las longitudes de onda y los ángulos de luz que se emiten y las temperaturas a las que se crean.

Diferentes tipos de partículas en el mundo natural y artificial

No todas las partículas del mundo natural son iguales. De hecho, los distintos tipos de partículas producen efectos diferentes en el medio ambiente. La principal diferencia entre el mundo natural y el artificial es la gran cantidad de tipos de partículas que entran en contacto con el medio ambiente. En el mundo natural, muchas sustancias orgánicas volátiles, o V Os, están presentes en una amplia variedad de formas, como aceites vegetales, carbohidratos, aminoácidos y proteínas. Los océanos y la superficie de la Tierra albergan una gran variedad de sustancias orgánicas volátiles, lo que los convierte en un buen punto de partida para comprender cómo interactúan estas partículas entre sí y con el medio ambiente.

Cómo identificar una partícula en la naturaleza

La forma más común de identificar partículas en el mundo natural es por la vista. La mayoría de estas partículas se encuentran en unas pocas formas, como el suelo o las rocas. Una vez que has determinado qué tipo de roca o suelo estás buscando, el resto del mundo natural prácticamente desaparece. Seguirás viéndolo, pero no lo reconocerás como tal. También puedes utilizar al máximo tus ojos, un gran recurso para identificar las partículas del mundo natural. Las partes que resultan más fáciles de ver son los poros, o poros agrupados, de las hojas de las plantas o de la superficie de las criaturas marinas. También puedes examinar el interior de tu mano para identificar algunos tipos de partículas.

¿Qué partículas se afectan entre sí?

Como ya hemos mencionado, muchos tipos de partículas se afectan entre sí. Las formas más comunes son la fuerza gravitatoria y la carga eléctrica de las dos partículas. La gravedad puede afectar a la cantidad de una partícula, alterando su tamaño, composición y estados energéticos. Por ejemplo, un vaso de agua que se mantiene a una temperatura constante tendrá una densidad mayor en comparación con un vaso de agua caliente. Otra forma de efecto que afecta a muchos tipos de partículas es la probabilidad de que haya otra partícula cerca. Este efecto se denomina «bioacumulación» de las partículas y se produce cuando varios tipos de rocas se encuentran en las proximidades. Muchas especies de plantas son bastante susceptibles a este efecto y tendrán una mayor concentración de unos tipos de partículas que de otros.

¿Qué partículas son «vivas» o «no vivas»?

Como hemos mencionado, las partículas están formadas por muchos elementos diferentes, oroquímicos. Cada tipo de partícula está formado por un gran número de elementos más pequeños, o grupos reactivos, que necesariamente están «vivos». Generalmente, los grupos vivos son los que pueden responder a estímulos externos, como presiones o vibraciones, mientras que los no vivos están formados por materiales menos atractivos, como el aire y la tierra. Las partículas con Grupos reactivos atractivos, como el hierro y el magnesio, se denominan «calientes» o «energizadas». Algunos de los Grupos de reacción menos atractivos, como el calcio y el hierro, están «muertos» o «inyectados» en el medio ambiente. Estos átomos pueden ser muy difusos, o esparcidos, lo que significa que no son fácilmente detectados por el ojo o el sensorio humano.

Partículas que entran en cada categoría

Hay muchos tipos diferentes de partículas que se estudian en la biología moderna. Algunas se estudian en el laboratorio, mientras que otras se estudian sobre el terreno. La mayor parte de la investigación sobre partículas se realiza en el laboratorio y no es necesariamente relevante para el entorno en el que vivimos. Entre las partículas de interés para el medio ambiente se encuentran las sustancias orgánicas volátiles como el petróleo y el gas, los gases industriales y el polvo carbonáceo, por nombrar algunas.

Partículas de la materia: De qué están hechas y cómo funcionan.

La mayor parte de la información sobre las partículas en el mundo natural puede encontrarse en dos libros: Los Principios de la Química Orgánica y La Teoría Cuántica de la Física de Partículas. El primer libro ofrece una visión general de los distintos tipos de partículas que conocemos y de cómo interactúan con el entorno. El segundo libro se centra en la física real de cómo estos grupos reactivos interactúan con el entorno para producir distintos tipos de iones negativos.

Conclusión

Las partículas son en realidad dos cosas diferentes: neutras y cargadas. El tipo neutro es el que vemos normalmente en el aire, donde ninguna carga está polarizada y no hay forma de que una partícula positiva (como un átomo) atraiga a una negativa (como un átomo).La carga se encuentra en el interior de la partícula y se llama su carga positiva. Las partículas de materia son las que componen todo, desde las rocas hasta los aviones. Se mueven por el aire, surcan los cielos e interactúan con otras partículas como nosotros. Cada tipo de partícula tiene la capacidad de afectar al entorno que la rodea una vez que se libera. Una partícula cargada puede provocar un pequeño bache en el entorno que puede ser perjudicial o beneficioso según lo que atraiga y lo que reprima.

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